Se inicia en la infancia temprana. Los niños, aun teniendo una inteligencia normal o superior a la media, eran incapaces de acceder a la enseñanza reglada debido a sus comportamientos extraños.
| Los síntomas han de estar presentes en las primeras fases del período de desarrollo (pero pueden no manifestarse totalmente hasta que la demanda social supera las capacidades limitadas, o pueden estar enmascarados por estrategias aprendidas en fases posteriores de la vida.
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Tendencia a la soledad y a evitar, desde la infancia, a otras personas, rechazando la compañía de otros niños.
| Disminución en emociones o afectos compartidos. Falta total de expresión facial y de comunicación no verbal.
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Ausencia de interés por otras personas. Fracaso en iniciar o responder a interacciones sociales.
| Aplanamiento de la vida afectiva. Ausencia de expresividad facial y mímica expresiva.
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Evitación de los juegos participativos con otros niños y preferencia por las historias fantásticas y los cuentos de hadas. Dificultad de adaptarse a otros niños.
| Dificultad para compartir juegos imaginativos y para hacer amigos. Deficiencia en las conductas comunicativas no verbales utilizadas en la interacción social.
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Pedante, sigue reglas muy repetitivas y marcadas con normas peculiares y exigentes.
| Dificultad para ajustar el comportamiento en diversos contextos sociales.
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Fuertes intereses que sigue de una manera exclusiva. Intereses preservados; por ejemplo, una conversación marcada por temas obsesivos y repetitivos. Se aferra a ciertos temas. Tendencia a un comportamiento de tipo obsesivo-compulsivo.
| Insistencia en la monotonía, excesiva inflexibilidad de rutinas o patrones ritualizados de comportamiento verbal o no verbal. Patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades.
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Comportamientos parecidos a tics, movimientos estereotipados. Realización de muecas. Neologismos estereotipados. Preguntas repetitivas, habla de manera estereotipada. Habla rápida o circunscrita.
| Habla estereotipada o repetitiva (p. ej., estereotipias motoras simples, alineación de los juguetes o cambio de lugar de los objetos, ecolalia, frases idiosincrásicas). Patrones de pensamiento rígidos, rituales de saludo.
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Tendencia al automatismo, adherencia a las tareas que habían empezado, inflexibilidad psíquica con dificultades para adaptarse a lo nuevo.
| Intereses muy restringidos y fijos en cuanto a su intensidad o foco de interés (p. ej., fuerte apego o preocupación por objetos inusuales, intereses excesivamente circunscritos o perseverantes).
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Hablar «estereotípicamente», tener «fuertes intereses perseguidos exclusivamente» y «sensibilidad a ruidos u olores específicos».
| Comportamiento estereotipado o repetitivo, intereses restringidos y sensibilidad sensorial.
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Explosiones emocionales. Si se le interrumpe, se pone nervioso e inquieto; al reanudar la tarea. empieza otra vez la historia desde el principio.
| Gran angustia frente a cambios pequeños, dificultades con las transiciones.
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